En Marbella y en el momento actual, principios de 2016, se dan una serie de razones que avalan el crecimiento y la progresión de la que está gozando el mercado inmobiliario en la zona y que invitan al optimismo.
La primera es el estado de ánimo en general. Existe la sensación de que estamos saliendo de la crisis económica de los últimos años. Siempre se ha dicho que Marbella es la primera que entra en la crisis y la primera que sale de ella. Actualmente, los comentarios pesimistas han ido desapareciendo y está regresando la confianza. Y esto impulsa al gran volumen de compradores que han estado conteniéndose durante la crisis para dar el paso de adquirir una propiedad en este paraíso.
En Marbella, la demanda de viviendas está fuertemente basada en la compra de extranjeros (sobre el 85%), por lo que los países que prácticamente han salido de la crisis (principalmente norte de Europa) unido al retorno de compradores tradicionales (rusos, árabes, con especial énfasis en Irán, al cesar el bloqueo), hacen que el mercado no dependa de la demanda nacional (aún débil) y esté alcanzando una velocidad de crucero que se acerca a la anterior a la crisis de 2007.
El Euro contribuyó hace unos años a que la gran masa de potenciales compradores británicos se retirara, dada la fortaleza de este con la Libra Esterlina. Ahora ocurre justo lo contrario. La Libra se ha revalorizado un 15% respecto al Euro en el último año, por lo que, para un británico, los precios han bajado en España. Lo mismo ocurre con el Dólar, también muy fuerte, que hace que compradores no europeos vean una oportunidad de inversión más atractiva.
La baja remuneración del dinero, con unos tipos de interés tendentes a 0%, hace que las inversiones en fondos y depósitos sean mucho menos atractivas, por lo que la inversión inmobiliaria vuelve a tomar gran protagonismo. Estos tipos bajos hacen también más asequibles las hipotecas, por lo que favorecen la adquisición de propiedades a un mayor número de potenciales compradores.
Y a todo esto se une la estabilidad, seguridad, modernidad, infraestructuras de Marbella – Costa del Sol, que la hacen destacar como un destino residencial puntero en el mundo, muy alejado de la inestabilidad política y de seguridad de otros lugares en la mente de todos. A esto debe añadirse el clima sensacional de Marbella, la oferta de ocio, deportiva, gastronómica, de entretenimiento, que se mantiene los 365 días del año, con lo que hace de Marbella uno de los mejores lugares para vivir, residir y disfrutar de un estilo de vida excepcional.
Con todo esto, podemos asegurar que ahora es el momento de adquirir una propiedad en Marbella, antes de que los precios recuperen los niveles de hace unos años y mientras haya una oferta extensa y variada de propiedades. En Magna Estates disponemos de un amplio listado de propiedades en venta en el que, estamos convencidos, se encuentra la casa de sus sueños. Déjenos asesorarle, charlemos al respecto y encontremos juntos lo que usted busca… antes de que sea tarde.
